Información general sobre la acetona
La acetona es un disolvente también conocido como propanona o dimetilcetona. Pertenece a la clase de las cetonas.
Esta sustancia se encuentra de forma natural en el cuerpo humano, donde se forma en el hígado. Como no puede metabolizarse, se exhala por los pulmones o se libera por la orina, sobre todo en la diabetes mellitus.
Propiedades de la acetona
La acetona es un líquido incoloro de olor dulce que se utiliza principalmente como disolvente y como material de partida para muchas síntesis en química orgánica.
El grupo carbonilo o ceto con dos grupos metilo es la cetona más simple. Debido al tautomerismo ceto-enol, la acetona puede reaccionar tanto de forma alcalina como ácida, ya que puede absorber y liberar protones. Esto permite las llamadas reacciones aldólicas, que pueden ser catalizadas tanto por bases como por ácidos. Debido a su grupo carbonilo polar, la acetona también puede formar compuestos complejos con cationes.
La acetona se disuelve bien en agua, alcohol, benceno y éter dietílico, así como en muchos disolventes orgánicos. Es muy inflamable y forma una mezcla explosiva con el aire. La acetona es una sustancia volátil, lo que significa que se evapora rápidamente a temperatura ambiente.
La acetona forma mezclas de ebullición azeotrópica con algunos otros disolventes, por lo que la fase de vapor tiene la misma composición que la fase líquida. La conductividad eléctrica es bastante baja.
Hoy en día, la acetona se produce principalmente mediante el proceso de hidroperóxido de cumeno, también conocido como síntesis de fenol según Hock. En este proceso, el benceno y el propeno se convierten en isopropilbenceno (cumeno) por alilación de Friedel-Crafts en ácido. A continuación, éste reacciona con el oxígeno en una reacción radical para formar hidroperóxido, que se descompone en fenol y acetona cuando se añaden ácidos fuertes.
Otro proceso de fabricación es la deshidrogenación u oxihidrogenación del isopropanol.
